Foto Suministrada
«Yo voy a demandar a porque el daño que me hicieron fue muy fuerte, muy grande”. Así le expresó Maribel Martínez Tapia a El Diario, sobre la decisión que tomó de entablar una demanda contra esa aerolínea por haberle entregado un niño equivocado el pasado 17 de agosto, cuando ella esperaba por su hijo Andy de 5 años en el aeropuerto JKF, quien regresaba de unas vacaciones en Santiago, en República Dominicana.
“Estoy mal, estoy nerviosa, no como,” dijo la madre, al explicar las consecuencias negativas que le produjo la pesadilla que vivió hace casi 10 días. La mujer, que asegura que sufre de ansiedad y nerviosismo, llegó a la principal terminal aérea de Nueva York y encontró un niño desconocido con el pasaporte y maleta de su hijo, Andy.
La madre había pagado $100 extra a JetBlue para que la aerolínea asistiera con su hijo que viajaba solo. Sin embargo, a la madre le entregaron otro menor que también procedía de Santiago y cuyo destino final era Boston, a donde al final fue a parar Andy en manos de otros padres.
La terrible experiencia además de afectar a Maribel, también ha dejado secuelas en su esposo Rafael Mercado e hijo, quienes también siguen nerviosos. La madre contó que el pequeño amaneció el día después con dolor de barriga y rodillas, y el doctor dijo que era por el estrés de estar tantas horas en el aire sin su familia. Y es que al ser devuelto a Nueva York desde Boston, Andy pasó 12 horas volando en vez de las cuatro que originalmente dura su trayecto.
La mujer dijo que ese día también sufrió de mucha preocupación debido a que el padre del menor tiene la azúcar y presión alta, por lo cual ella temía que le diera un ataque.
En una declaración JetBlue no comentó sobre la demanda, pero sí explicó que los niños de la misma edad estaban en el aeropuerto de Santiago y fueron sentados en el avión equivocado. “Cuando nos dimos cuenta del error, nuestros equipos en JFK y Boston inmediatamente tomaron pasos para asistir a los niños en llegar a su destino correcto. Mientras que los niños estuvieron siempre bajo la supervisión y cuido de un miembro de JetBlue, comprendemos que la situación es dolorosa para las familias”, explicó un vocero.
La aerolínea también indicó que está trabajando con el aeropuerto de Santiago para prevenir situaciones similares en el futuro.
JetBlue mandó una carta pidiendo perdón a las familias, y le reembolsó los $460 que pagaron en el viaje del niño y le ofrecieron un crédito de $2,000. Sin embargo, la madre no quiere el dinero. “No me hace a mi nada, nada porque yo estaba muerta”, describió.
Martínez que dijo ser muy apegada a su hijo contó que en estos últimos días no saca al niño de su cuidado. “No quiero que se me salga y lo quiero tener cogido de la mano todo el tiempo”, expresó.
La dominicana sintió que la policía del aeropuerto no le dio el “respeto ni atención” que merecían ya que no llenaron un reporte.
La Autoridad de Puertos de Nueva York y Nueva Jersey, el cuerpo que tiene jurisdicción criminal en los aeropuertos, confirmó a El Diario que no tiene récord de un reporte sobre el incidente del pasado 17 de agosto. “Yo entiendo su preocupación pero no es un asunto policial si no están en peligro y llegaron a sus destinos. Es un asunto del consumidor”, dijo Joe Pentangelo, un vocero.
Menores que viajan sin acompañante
Todas las aerolíneas tienen diferentes especificaciones sobre como los menores pueden viajar sin acompañantes, pero por lo general la mayoría tienen procesos especiales para niños de 5 a 11 años. (Algunas aerolíneas tienen estos procesos hasta con niños de 14.) Usualmente a los menores de 5 a 7 años sólo los dejan volar sin acompañantes en vuelos directos. Es importante tener identificación para comprobar la edad del niño.
Si quieres que tu hijo viaje solo, mientras más simple el vuelo, mejor. Existen restricciones si el vuelo tiene conexiones, por ejemplo algunas aerolíneas no dejan que los menores no acompañados vayan en el último vuelo del día. Esto se debe a que los vuelos más tempranos son menos propensos a ser cancelados o estar retrasados.
Una opción para asegurarte que tu hijo se montó en el vuelo correcto es preguntar por un “gate pass” que es un permiso que te deja ir a la puerta de embarque. Para esto se necesita una identificación oficial. El Departamento de Transportación federal recomienda que te quedes en la puerta hasta que el vuelo despegue.
Para prepararte para el vuelo de tu hijo, asegúrate que tu hijo o hija sepa dónde buscar ayuda. Para el vuelo de ida y vuelta debe estar en ropa cómoda y asegúrate poner sus iniciales en las piezas que se quite como una gorra o chaqueta.
Muchas aerolíneas no permiten que los empleados le den medicación a los pasajeros, así que asegúrate consultar con tu doctor cuáles son las mejores opciones.
Llegar al aeropuerto una o dos horas antes, depende si es un viaje doméstico o internacional. Trae al aeropuerto la dirección del hogar, nombre, y el número de la persona que va a recoger a tu hijo.
Puede ser que le den a tu hijo una insignia diciendo que es un menor no acompañado. Recuérdale no quitarse esto hasta que se encuentre con la persona que lo recogerá.
La mayoría de las aerolíneas cobran una cuota de $50 a $100 por cada viaje adicional al precio del boleto. La cuota puede ser mayor en viajes internacionales.
¿Qué debe de traer?
Una copia del itinerario completo incluyendo los días, la aerolínea, el número de vuelo, los horarios de ida y vuelta, y el número de reservación. Tú y la persona que lo va a recoger también deberían tener una copia de este documento. Escribe tus números de celular, casa, y trabajo y los números de la persona que lo va a recoger. También incluye tu nombre y el de tu hijo por si las maletas se pierden.
Libros, juguetes pequeños interactivos, juegos, libros de pintar, crayones, etc. Si trae un videojuego o dispositivo de música, asegúrate que tenga audífonos. Indícale que al principio del vuelo le dirán que apague los equipos electrónicos.
Una merienda, sin incluir líquidos ya que no los permite el TSA. Además debe de tener efectivo para comprarse algo de comer si se atrasa el vuelo.
Cualquier objeto esencial por si se atrasa el vuelo como medicina, espejuelos, y un cambio de ropa.