La mejor manera de iniciar el 2016 es hacerlo de manera tranquila y sin deudas, si estás bien preparado, no deberías padecer la «cuesta de enero«.
Obed Medina, Gerente de Marketing Digital en Prestadero, opina que si tienes deudas a largo plazo, es imposible que empieces el 2016 sin ellas, a menos que las liquides todas. Sin embargo puedes tomar en cuenta algunas recomendaciones para reducir la tentación de gastar y endeudarte más.
1.- Limita tus gastos
Evita comprar cosas que no son indispensables. Una buena forma de controlar tus gastos es preguntarte si realmente necesitas lo que vas comprar, si es indispensable para tu vida diaria. Si la respuesta es “no”, descarta comprarlo. Una forma de apoyarte es una lista de compras y apegarte a ella.
2.- Evita centros de consumo
Centros comerciales, parques de diversiones y cines son centros de consumo por excelencia. La finalidad de acudir a estos lugares es sin duda comprar, es recomendable evitar visitarlos para que reduzcas la tentación de realizar algún gasto.
Caso contrario: revisa la guía de tu ciudad, seguramente hay cientos de museos y eventos culturales a los cuales puedes acudir y son más económicos o incluso gratuitos.
3.- Gasta de acuerdo con tus ingresos
Principio básico de finanzas personales: si ganas $20 mil pesos al mes gasta sólo $15 mil. Si deseas gastar más entonces estarás en una crisis financiera de la cual puede que nunca salgas. Respeta tus ingresos mensuales para hacer tus gastos y asumir deudas que no los sobrepasen o siempre tendrás deudas con pagos atrasados.
4.- Si no lo puedes pagar no lo compres
Esto no quiere decir que no te compres una casa o un auto. Más bien: si algo que quieres se sale de tu presupuesto no lo compres. Mejor ahorra para comprarlo más adelante. Esto es particularmente difícil en esta temporada cuando surgen “promociones” irresistibles o se liberan ediciones limitadas de algún producto.
Ahorra para cualquier inesperado evento o gusto que te puedas dar, por ejemplo, visualizar que si ahorras $500 pesos al mes equivalen a $60 mil pesos en 10 años. Cantidades nada desdeñables teniendo en cuenta el relativamente pequeño esfuerzo que puede suponer apartar esa cantidad (o la que sea) cada mes, concluyó Medina.