Alrededor de las 3:30 de la tarde del domingo, 4 de octubre del 2020, los agentes Toledo, Coreano y Silva adscritos a la Unidad Marítima de Cabo Rojo, se encontraban navegando a bordo de la Cobra-17 de sur a norte por un sector de Cabo Rojo cuando intervinieron con una embarcación sospechosa en la zona. Cuando llegaron al área de la Playuela, se percataron de un bote de placer, el cual intentaba entrar a un area de mangles.
Estos intentaron intervenir con el bote, que se adentró a un canal y el tripulante huyó entre los mangles.
Los agentes incautaron 117 kilos de cocaína abandonados en dicho bote, los cuales fueron entregados a los agentes federales del Border Patrol en Aguadilla.