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Algunas investigaciones muestran que una de las peleas más comunes entre las parejas se centra alrededor de la frecuencia sexual. Las expectativas insatisfechas en la cama pueden infiltrarse y causar problemas de comunicación, una falta de conexión emocional, e inestabilidad general en la relación.
No existe una cantidad correcta de relaciones sexuales. Cada pareja es diferente, y lo más importante, cada persona se enfrenta a circunstancias que le cambian la vida y su deseo sexual.
Algunas investigaciones muestran que una pareja «promedio» por lo general, tienen sexo cerca de 2 o 3 veces por semana. Cada pareja tendrá buenas y malas semanas en términos de frecuencia de la intimidad y no hay un número de relaciones sexuales que las parejas necesiten alcanzar, para ser sanas.
Modificar la frecuencia del sexo, sólo mejorará la sexualidad de la pareja, pero no necesariamente ayuda con temas más complicados y conflictivos que pueden estar experimentando.
Si te preocupa que los problemas de intimidad sexual hayan creado problemas a largo plazo en la relación, busca la asesoría correcta y obtén un diagnóstico completo de la salud de tu relación.
