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El secretario del Departamento de la Vivienda (DV) Alberto Lastra Power, entregó un total de $82,896.60 en vales de ayuda para la compra de materiales de construcción y reparación de viviendas a 46 familias de la región de Bayamón cuyas estructuras necesitan reparaciones inmediatas.
«Hoy tenemos familias de Bayamón, Comerío, Dorado, Naranjito, Toa Baja y Vega Alta que solicitaron a nuestra oficina regional de Bayamón asistencia para la reparación de sus hogares. Nuestra misión consiste en brindar las mejores oportunidades de vida a las familias puertorriqueñas mediante un hogar apto y seguro y eso es lo que hacemos hoy aquí», mencionó complacido Lastra Power.
El secretario explicó que para Bayamón se entregaron ocho ayudas para un total de $12,347.35 y Comerío dos familias con $2,900.41. Mientras que 10 familias de Dorado recibieron ayudas por $20,128.33, al igual que 13 familias se beneficiaron en Naranjito para un total de $19,279.92. De otro lado, en Toa Alta se incluyó una familia con $1,267.87, Toa Baja con 4 familias que totalizaron ayudas por $5,080.18, y finalmente en Vega Alta ocho familias con $21,007,44. La inversión global es producto de asignaciones legislativas.
«Siempre nos complace mucho este tipo de ayuda porque además de beneficiar a las familias que necesitan sus residencias reparadas, tenemos un efecto económico local importante porque todos estos materiales se adquieren en ferreterías del patio. Así que el beneficio tiene un efecto doble», mencionó Lastra.
El Arquitecto destacó que entre el mes de enero del 2013 al presente, el (DV) ha otorgado 1,856 títulos de propiedad como parte del compromiso del gobernador Alejandro García Padilla con las familias puertorriqueñas. En el mismo periodo, la agencia ha otorgado ayuda para la compra de materiales de construcción a 3,566 familias con una inversión de $5.3 millones.
Por otro lado, desde julio del 2014 hasta julio del 2016, hemos entregado 2,150 vales de sección 8. Son 2,150 dueños de viviendas con ingresos asegurados en este momento importante de la recuperación económica de Puerto Rico. Esto representa una inyección global anual de $12.6 millones anuales en pagos por alquiler.
