El equipo del Puente de Acero, adscrito al Departamento de Ingeniería Civil y Agrimensura (INCI) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), obtuvo el primer lugar general en la Canadian National Steel Bridge Competition (CNSBC), evento que se llevó a cabo en la Western Ontario University, en Canadá.
El grupo colegial, compuesto por 14 estudiantes, alcanzó el primer lugar en las siguientes categorías: Lightness, Construction Economy, Cost Estimate, Construction Speed, y Circular Engineering. Del mismo modo, logró tercer lugar en el renglón de estética.
Previo a este primer lugar, los jóvenes obtuvieron tercer lugar en las competencias regionales de la American Society of Civil Engineers (ASCE), lo que permitió que clasificaran en las competencias nacionales de Estados Unidos, por noveno año consecutivo.
«Estos logros representan el fruto de nuestro esfuerzo y las largas horas de trabajo. Nuestro equipo se distingue por ser uno de los que más tiempo dedica en la Universidad, ya que estamos reuniéndonos desde junio aprendiendo los diferentes programas de computadoras que necesitamos, las reglas, métodos de diseño, fabricación, construcción, y ensamblaje, entre otros. Estamos todo el año sacrificando tiempo de estudio, tiempo de calidad con nuestras amistades y familias y dando 100 por ciento para tener la oportunidad de competir y lograr la más alta posición y el mejor rendimiento posible, así que nos llena de orgullo y satisfacción ver cómo, después de tanto sacrificio, podemos cumplir cualquier meta que nos proponemos», expresó Joseph E. González Ortiz, capitán del equipo y estudiante de INCI.
En esta ocasión, compitieron 13 universidades de Canadá, Estados Unidos, México, Japón y Puerto Rico, representado por los colegiales.
«Haber ganado una competencia internacional es un orgullo para el Colegio, pues indica que nuestros estudiantes están bien preparados para desempeñarse en el campo de la Ingeniería, tienen la capacidad para hacer un diseño eficiente que utilice la menor cantidad de materiales y la puedan construir en el menor tiempo posible. Debo añadir que los estudiantes le dedican muchísimo tiempo trabajando todos los días a partir de las 6:00 p.m. hasta altas horas de la noche, incluyendo sábados y domingos», expresó, por su parte, el doctor José O. Guevara, catedrático de INCI y mentor del colectivo.
Asimismo, el doctor Agustín Rullán Toro, rector del RUM, felicitó a los jóvenes por este triunfo. «Año tras año los integrantes del equipo del Puente de Acero se destacan en su desempeño en estas competencias internacionales. Sentimos gran orgullo por su gesta y sabemos que lo aprendido durante el proceso, será un tesoro para la vida futura. ¡Enhorabuena!», dijo el Rector.
Los desafíos del evento incluyen diseñar, construir y ensamblar un puente hecho completamente en acero en escala 1:10, lo que significa que si se fuera a llevar a cabo como un proyecto real sería diez veces más grande.
«Además, tenemos el reto de que cada elemento del puente no puede ser más largo de tres pies con seis pulgadas y debe tener una sección que cumpla con los estándares provistos. Asimismo, tenemos el límite de diseñar alrededor del río, carretera u obstáculo que nos pongan en el suelo, que típicamente mide entre cinco a siete pies. Esto hace que, a la hora de ensamblar el puente, no podamos pararnos dentro del área, dificultando el proceso de diseño y de construcción. Nos evalúan mediante presentaciones orales, elevator pitch, diseño de un póster técnico, rigidez y deflexión, peso, tiempo de construcción y cantidad de personas utilizadas para construir el puente. Se crea una relación entre rigidez y construcción con costo y se escoge el puente con el costo más bajo y este es el que gana», detalló el capitán del grupo.
Agregó que en las competencias nacionales que serán el 2 y 3 de junio, participarán 49 universidades.
«Estamos muy contentos con nuestro desempeño, pero vamos por más. Tenemos el potencial de tener mejor rendimiento aún en las Competencias Nacionales Estadounidenses de la American Institute of Steel Construction (AISC) y nada de esto fuera posible si todos los miembros del equipo no estuvieran en la misma página, ni dando siempre lo mejor de ellos. Quiero felicitarlos a todos por su gran trabajo durante este año, estoy sumamente orgulloso de cada persona que compone este gran equipo. También quiero agradecer a nuestros técnicos de laboratorios, nuestro advisor, al director de Departamento y a los auspiciadores, por toda la ayuda que nos han brindado durante este largo año. Antes, ahora y siempre… ¡Colegio!«, concluyó Joseph.