El Senador por Acumulación Abel Nazario Quiñones presentó el Proyecto del Senado 452, que regularía un nuevo sistema automático de control de tránsito y permitiría su implementación nuevamente en las vías de alto riesgo de la Isla. Este, podría ser visto en la próxima Sesión Ordinaria, que comenzará el 21 de agosto.
Sin embargo, según Nazario esta nueva versión contaría con “un proceso de revisión uniforme y confiable” ya que el proceso para impugnar las multas sería idéntico al que se realiza para cualquier otra multa de tránsito. Esto, para evitar confusión y garantizar a los ciudadanos su derecho a un debido proceso de ley.
El proceso de vistas públicas comenzará antes de octubre, dejó saber la Comisión Senatorial de Innovación e Infraestructura, a la cual fue referida esta pieza legislativa.
“Uno de los problemas principales del pasado sistema de foto multas fue el proceso de revisión administrativa para impugnar las multas. Los conductores no sabían cuál era el proceso para revisar y someter quejas sobre las multas expedidas. Específicamente no se estableció qué entidad estaría a cargo de este proceso, si el Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP) o la compañía privada que instaló el sistema. Con esta nueva versión se garantiza a cada ciudadano el derecho a un debido proceso de ley y elimina cualquier confusión. Además, el proyecto hace una nueva distribución de los recaudos que generarían las multas” expresó Nazario Quiñones.
La distribución de los fondos que se recauden sería; 25% para el Sistema de Retiro de los Policías afectados por la ley 3 – 2013 de Puerto Rico; 5% al Centro Molecular de Puerto Rico; 5% para el pago de las horas extras de la Policía de Puerto Rico y para el cumplimiento con la deuda existente a los policías del País; 15% para la infraestructura y compra de equipo para el Centro Médico de Puerto Rico; 25% para el pago de la deuda de Puerto Rico y 25% restante se distribuirá entre los municipios donde estén ubicados los sistemas de foto multas de manera proporcional.
Del mismo modo la pieza, que enmendaría la Ley de Tránsito, atendería la calibración de las cámaras y radares que detectan las infracciones. Según la Exposición de Motivos de la medida, esto generó gran incertidumbre entre los conductores, pues ante un posible proceso de revisión de las multas, se desconocía si el equipo estaba debidamente calibrado al momento de detectar las infracciones.
El Secretario del DTOP establecería, mediante reglamento, el Sistema de Revisión y Calibración de los Equipos Electrónicos utilizados para detectar infracciones de tránsito, así como implantar el sistema mediante Alianzas Público Privadas Participativas (APPP).
Las subastas se llevarán a cabo mediante el procedimiento contemplado para ello en la Ley de Alianzas Público Privadas Participativas (Ley Núm. 29-2009). Así, se garantiza una mayor transparencia en el otorgamiento de dicho contrato y permite que se evalúen propuestas de diferentes compañías para escoger aquella que sea más eficiente y con un costo menor al erario.
“En el pasado, el sistema automático de control de tránsito fue instaurado por una compañía privada. Esta contratación generó mucha controversia toda vez que se llevó a cabo sin una subasta formal o pública, a pesar de representar un gasto gubernamental de aproximadamente $6 millones. Según se conoce, este contrato fue cancelado debido a las faltas que presentaba el sistema, reembolsándose así el dinero pagado a los conductores multados,” indicó el autor en la pieza legislativa.
De igual forma, se contemplaría darle la potestad a los municipios de adoptar sus propios sistemas automáticos de control de tránsito, operarlos y realizar el envío de las multas.
La actual Ley de Vehículos y Tránsito le permite al Secretario delegar solo a funcionarios, empleados del DTOP, agencias gubernamentales y empresas privadas la operación de los sistemas automáticos de control de tránsito. Sin embargo, dicha autoridad le sería conferida a los municipios si la medida fuera convertida en Ley.
Según estudios realizados en Estados Unidos, el uso de los sistemas automático de control de tránsito reduce el número de accidentes en las vías de alto riesgo e igualmente la velocidad en la cual los conductores conducen por las mismas. A su vez, al no ser necesaria la presencia de agentes del orden público en estas vías, permite que se concentren sus esfuerzos en combatir la criminalidad en otras áreas.