Hay tristeza y asombro en la Comunidad Fortuna de Vega Alta por las intenciones de la secretaria del Departamento de Educación (DE), Julia Keleher de ordenar el cierra de la Escuela Elisa Dávila Vázquez, que ofrece servicios de kinder a sexto grado a 183 alumnos. Los padres se manifestarán en una vigilia hoy martes a las 7:00 de la noche frente a la escuela, por lo que solicitan la asistencia de la comunidad, para solicitar a Keleher que atienda sus reclamos.
«Ella llegó al DE hace poco como Secretaria y antes fue contratista, pero esta Escuela Elisa Dávila Vázquez lleva aquí toda una vida. No entendemos porqué la quiere cerrar, porque antes estuvieron en lista las escuelas con menos de 100 estudiantes, luego subieron ese número a 200 y luego a 250, pero nosotros tenemos una propuesta realista para estas facilidades», expresó Lisandra Pérez, madre voluntaria y portavoz de la comunidad.
«Esta escuela puede ser receptora de otras porque tenemos la planta física para eso. Keleher debería saber que los padres vegalteños cuyos hijos se van a quedar sin escuelas por los cierres, están solicitando matricularlos en otra escuela (La Rafael Hernández en Santa Ana) y les están negando la misma por falta de espacio», aseguró la líder comunitaria. El grupo argumenta además que la escuela Elisa Dávila Vázquez cuenta con tutorías hasta las 6:00 de la tarde y se ofrecen terapias ocupacionales, sicológicas, de habla y físicas a los estudiantes. De igual manera, se ofrecen tutorías de inglés y computadoras.
«Eso es una ventaja para los padres porque tienen un lugar especializado de servicios que se puede ampliar. Nuestra Escuela Elisa Dávila Vázquez cuenta además con el servicio de loncheritas de los viernes, del programa federal COASI para que los niños en edad escolar también reciban alimentación adecuada durante fines de semana. Además, el servicio de biblioteca se ofrece hasta las 6:00 pm y se usa mucho porque nuestra escuela está cerca del pueblo y vienen estudiantes de otros lugares» , abundó Pérez.
«Esta noche nos vamos a congregar en la escuela, cada cual con una vela como símbolo de esperanza, pero también de lucha por nuestros niños. Nosotros tenemos los brazos abiertos para recibir estudiantes de otras comunidades. Nos preocupa además lo que pasaría si cierran estas facilidades, pues todo Puerto Rico sabe lo que pasa con esas escuelas vacías, las vandalizan, pero tampoco se las ofrecen a las comunidades», abundó.
Por su parte, el alcalde de Vega Alta, Oscar ‘Can’ Santiago se solidarizó con la comunidad, toda vez que la cantidad de servicios que se ofrecen en la misma ameritan que el DE haga un análisis a profundidad. «Nuestra exigencia es simple: si esta escuela tiene las facilidades y en Santa Ana ya no hay espacio para los que están solicitando, la Elisa Dávila es una alternativa. Consideramos que la Secretaria de DE y su equipo de trabajo debe reexaminar este caso por el bien de nuestros niños y sus familias», finalizó el Alcalde vegalteño.