El presidente de la Federación Central de Trabajadores (FCT, local 481 UFCW), Juan Cortés Valle, declaró que los trabajadores se oponen tenazmente a una pieza legislativa que transfiere los balnearios de Cabo Rojo, Luquillo y Fajardo a los municipios porque implica reducir la protección de esos recursos naturales, inestabilidad para los empleados y hasta posible encarecimiento de costos para la ciudadanía.
Cortés Valle denunció que el pasado jueves la Cámara de Representantes aprobó la resolución conjunta 376 sin celebración de vistas públicas y sin siquiera consultar al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (Drna), quien es la agencia que ahora administra el Programa de Parques Nacionales y titular de esos balnearios, según se desprende del trámite legislativo.
«En momentos de estrechez económica como los que vive el país, el pueblo trabajador no tiene dinero para vacacionar en hoteles costosos, los balnearios son la única opción. Eliminar la política pública uniforme que se establece en el Programa de Parques Nacionales es tirar los balnearios a la suerte porque muchos de los municipios están ahogados fiscalmente, no tienen ni para recoger la basura. No nos cabe duda que van a subir los precios a la gente», manifestó el dirigente sindical.
Dijo que la resolución se aprobó en Cámara aun en contra de las recomendaciones de la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal de Puerto Rico (Aafaf) que dijo que esa acción va en contra de la política pública de la misma Asamblea Legislativa que aprobó la Ley 171 del año pasado para implementar el «Plan de Reorganización del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales de 2018». Además, el Departamento de Justicia dijo que se debía consultar al Comité de Evaluación y Disposición de Propiedades Inmuebles. Sin embargo, no hay ninguna constancia de que se haya hecho esa consulta.
«Con esos impedimentos, la Comisión de Gobierno de la Cámara todos modos recomendó irresponsablemente esta medida. Hacemos un llamamiento al presidente del Senado, Thomas Rivera Shatz, a que no de paso a este desmantelamiento sin ton ni son del Programa de Parques Nacionales. Aquí hay muchas consideraciones que hay que tener en cuenta», puntualizó el presidente de la FCT-UFCW.
Dijo que lo que hay que hacer en los balnearios es «que se acabe de completar la transición al Drna y que esa agencia cumpla su deber ministerial de ponerlos en condición óptima porque la época veraniega está por empezar con la Semana Santa y el pueblo, merece tener opciones accesibles para recrearse y disfrutar de los recursos naturales».
La FCT se propone visitar a los senadores para promover que se hagan vistas públicas y que se cuelgue esta nefasta medida, señaló Cortés Valle.
«Los trabajadores y trabajadoras de Parques Nacionales no nos vamos a quedar de brazos cruzados mientras desmantelan nuestro centro de trabajo que además son recursos naturales del pueblo que debemos preservar», advirtió Cortés Valle.
La resolución conjunta de la autoría de Carlos Bianchi y Ángel Matos contemplaba solamente el Balneario de Boquerón (Cabo Rojo) y aparentemente fue enmendada para incluir a La Monserrate (Luquillo) y Seven Seas (Fajardo).