nicolas

 

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha celebrado la decisión de su homólogo estadounidense, Barack Obama, de conmutar la sentencia del independentista puertorriqueño Óscar López Rivera, encarcelado en una prisión del estado de Indiana desde hace 35 años.
«Felicitaciones, Puerto Rico», ha escrito el mandatario venezolano a través de su cuenta oficial de la red social Twitter. «La unión de la conciencia mundial logró la próxima liberación de Óscar López. Venezuela es tu casa y tu patria», ha añadido.
«Quiero darle las gracias a los movimientos sociales del mundo que nos unimos en petición para que el presidente Barack Obama concediera, como ha concedido el día de hoy, el indulto a nuestro hermano independentista puertorriqueño Óscar López Rivera», declaró posteriormente desde el Palacio de Miraflores, donde encabezaba un encuentro de alto nivel.
«Thank you very much, president Obama!. ¡Gracias tres veces gracias, Obama!», ha añadido, antes de señalar que a pesar de que desde Caracas es crítico con el presidente saliente, con el que ha tenido «polémicas duras», es necesario reconocer su decisión. «Al pan, pan y al vino, vino», ha remachado.
Maduro ha explicado que con esta decisión ha reconocido haber escuchado al pueblo puertorriqueño, pero ha insistido en que «aún quedan temas pendientes entre ambos.
En este contexto, ha pedido que «el todopoderoso lo ilumine en estos días antes de su salida de la Casa Blanca para que derogue de una vez la infame orden ejecutiva que califica a Venezuela como amenaza para ese país».
«¿Quién quita que un ángel de Dios aparezca y Obama se vaya sin cuentas pendientes con Venezuela?», ha preguntado. El presidente saliente ordenó el pasado viernes extender un año más la vigencia del decreto de «emergencia nacional» sobre Venezuela que aprobó en marzo de 2015, asegurando que la situación en el país latinoamericano «no ha mejorado».
INTERCAMBIO POR LEOPOLDO LÓPEZ
En 2015, Maduro aseguró que accedería a indultar al opositor Leopoldo López, líder del partido Voluntad Popular, en caso de que Estados Unidos liberase al puertorriqueño.
«La única forma por la que yo usaría las facultades especiales que tengo es para montarlo en un avión (a López), que vaya a Estados Unidos, lo deje allá y me entreguen a Óscar López Rivera», señaló entonces durante un discurso televisado.
López Rivera, que acaba de cumplir 74 años, está acusado de formar parte, a finales de la década de 1970, de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), organización responsable de actos de sabotaje en varias ciudades de Estados Unidos en reclamo por la independencia de Puerto Rico.
Por su parte, el líder opositor venezolano está condenado por los delitos de daño, incendio, instigación y asociación para delinquir a cerca de 14 años de prisión.
Los hechos se remontan al 12 de febrero, cuando miles de personas salieron a las calles de Caracas para protestar contra el Gobierno venezolano y decidieron marchar hacia la Fiscalía, donde fueron interceptados por los grupos armados afines al Ejecutivo, dando lugar a un duro enfrentamiento.
Las autoridades venezolanas consideran que López es el «autor intelectual» de estos disturbios, que marcaron el inicio de la actual crisis –que se ha saldado con 42 muertos, cerca de un millar de heridos y cientos de detenidos–, por convocar la marcha hacia la Fiscalía.

Share Button