YAUCO – Un soldador de 34 años, contra quien pesaba una orden de protección emitida en septiembre y quien fue acusado el Día de Reyes por violar la misma, ultimó anoche a balazos a su expareja de 30 años, madre de dos hijos, a la madre de ella de 51 años y un hermano de 28 años, y después se privó de la vida usando la pistola con la que cometió el cuarto feminicidio y la segunda masacre del 2024.El trágico suceso ocurrió a las 9:37 de la noche de ayer, miércoles, en el hogar de la joven, cerca de la cancha en sector Caimito, en la carretera PR-372, comunidad en la que las víctimas tienen muchos familiares.El soldador Wilfredo Hiram Santiago Figueroa, vecino del sector Burén, en el barrio Sierra Alta, volvió a violar la orden de protección y llegó hasta la casa de su expareja Linnette Morales Vázquez, una estudiante de ayudante de veterinario, con la que había mantenido una relación de unos ocho meses. En septiembre se separaron por los continuos ataques de celos y enero volvieron brevemente.El soldador la acosaba de forma que no la dejaba ni respirar y el pasado Día de Reyes ella se querelló contra él por haber violado una orden de protección que había obtenido cuatro meses antes. Fue acusado y fichado, y estaba en libertad bajo fianza esperando ser juzgado.Con una pistola Glock le disparó fatalmente a Linnette, madre de un niño de 10 años y de una adolescente de 14, quienes no estaban en la casa.También les dio muerte a balazos a Lizzette Vázquez Vélez, de 51 nos, empleada de Comedores Escolares, dueña de la casa en la que estaba Linnette, y al hermano de la joven Luis Miguel Morales Vázquez, de 28 años, quien laboraba como consejero en la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (Assmca).Wilfredo Hiram abandonó el lugar y fue a la casa de uno de sus hermanos, donde se privó de la vida.Los vecinos y familiares, muchos de ellos del barrio Diego Hernández, se conmocionaron al conocerse la tragedia y llegaron a las inmediaciones de la casa.Santiago Figueroa, quien estaba en libertad tras prestar una fianza $5 mil que le había señalado el juez Ángel Candelario, tenía casos previos de violencia de género, incendio y lesiones negligentes, había cumplido ocho años de cárcel.