El presidente de la Comisión de Salud del Senado, Ángel ‘Chayanne’ Martínez Santiago exigió al presidente de los Estados Unidos, Donald J. Trump, actuar con carácter de urgencia, para excluir a la isla de las disposiciones establecidas en la medida que pretende aprobar el Comité de Agricultura de la Cámara Alta federal, para prohibir el deporte de las peleas de gallos en todas las jurisdicciones de los Estados Unidos, incluyendo Puerto Rico.
Según explicó el senador por el distrito de Arecibo, actualmente la industria gallística genera casi 30,000 empleos directos e indirectos en la isla. La eliminación de esta actividad reduciría dramáticamente los recaudos del fisco, el cual se estima en alrededor de $80 millones anualmente.
«Los estragos de María, el peor huracán en golpear a Puerto Rico en generaciones afectó dramáticamente a miles de puertorriqueños que vieron perder sus casas y empleos a raíz de la crisis económica. Esto forzó un éxodo masivo de puertorriqueños hacia los Estados Unidos en busca de mayores oportunidades laborales en tiempos de crisis. De convertirse en ley la medida, la misma resultaría devastadora para el país», señaló el legislador.
El también portavoz alterno de la delegación del Partido Nuevo Progresista en la Cámara Alta le envió hoy una carta al mandatario estadounidense solicitándole atrasar por cinco años la puesta en vigor de la prohibición de las peleas de gallos y lograr que la industria permanezca.
«Sencillamente, no voy a permitir que se afecten los constituyentes a los cuales represento. De las 75 galleras que existen en la isla, 36 son de mi distrito de Arecibo. Si el presidente no pone de su parte, la crisis en Puerto Rico se agudizará de tal forma que miles de personas optarán por continuar con la práctica de forma clandestina, y los que decidan no hacerlo, tendrán que abandonar la isla luego de un año. Por tal manera, la ayuda de Trump en este tema es imprescindible y urgente», añadió el Senador.
Martínez Santiago dijo que estará dialogando con el gobernador, Ricardo Rosselló; la comisionada residente, Jenniffer González, y demás miembros de la Legislatura sobre este asunto durante los próximos días y que, de ser necesario, hará campaña en los medios estadounidenses para que se conozca esta cruda realidad del peligro de tener a casi treinta mil ciudadanos americanos desempleados a consecuencia de esta legislación a un año del azote del huracán María.