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La exprocuradora de las Mujeres, Johanne Vélez, envió su total solidaridad a los familiares y amigos de las víctimas de la masacre de Orlando, que afectó a puertorriqueños y puertorriqueñas miembros de la comunidad LGBTT, e invitó a una reflexión que muestre la fuerza de un colectivo unido en contra del discrimen.
«Esto es una pérdida que nos toca muy de cerca, como parte de la comunidad LGBTT que ha sido rechazada y marginada, pero que también nos toca como Pueblo, como puertorriqueños, por que las víctimas de esta masacre son nuestros hermanos y hermanas que como muchas otras personas dejaron su patria en busca de un futuro mejor, visitaban familiares o disfrutaban unos días de vacaciones. Hago un llamado al pueblo en general, que podamos unirnos y con la fuerza de cada uno de nosotros hacer sentir que somos un solo Puerto Rico», comentó la también abogada.
De paso, Vélez urgió a comenzar un proceso de reflexión profunda sobre cómo podemos unir esfuerzos para erradicar el discrimen y las acciones que tienden a deshumanizarnos. «Necesitamos reflexionar muy seriamente sobre los problemas de las armas y su disponibilidad, sobre el terror y el terrorismo, la salud mental individual y colectiva. Y sí, también tenemos que profundizar en el rol que juega la educación, la religión, las luchas por los derechos de toda persona. Necesitamos hablar de los discursos de odio, de quienes siembran temor y de las palabras que laceran la dignidad del ser humano, para ver cómo aportamos a una sociedad más justa y sin prejuicios», subrayó.
Del mismo modo, invitó a que como voces de diversos sectores, abracemos discursos más inclusivos y evitemos el rechazo o el ataque. «Hemos visto estas masacres desconcertantes, ocurriendo en escuelas, en iglesias, en restaurantes, y el pasado domingo, 12 de junio, le tocó en el Club Pulse a la comunidad LGBTT. Hay que combatir la homofobia y el odio, venga de donde venga, pero con educación – con apertura y diálogo – con mucha vehemencia, y con coraje sí, pero con el coraje que se demuestra para exigir respeto y dignidad, no con el coraje que destruye. Lo único que hay que destruir es la homofobia, el racismo, la intolerancia, el odio mismo. Vamos a construir una mejor sociedad, aprovechemos estos sucesos para unirnos más, no dividir más», recalcó.
Por último destacó que «yo soy parte de una comunidad que hoy llora, que hoy está de luto, somos mujeres y hombres que desde el domingo hemos redescubierto de manera salvaje nuestra vulnerabilidad ante el veneno de quiénes piensan que el mundo sería un mejor lugar sin nosotros. No tengo la menor duda, de que podemos hacer algo mejor, podemos criar a nuestras niñas y niños con amor y respeto, podemos educarles sobre el valor de la diversidad y la maravilla de vivir en paz».
