Las fiestas navideñas son una época perfecta para pasar tiempo en familia, disfrutar de exquisita gastronomía y brindar alegría a través de los regalos, pero la organización que requieren también puede ser muy complicada.
Cuando se tiene pareja, ya sea un noviazgo o matrimonio, decidir con cuál familia se pasará la Navidad puede ser complicado, sobre todo si ambos tienen costumbres y tradiciones a las que les es difícil renunciar.
De acuerdo con el terapeuta Kurt Smith, una buena manera de llegar a un acuerdo es preguntarle a tu pareja cuáles son sus planes, antes de mencionarle los tuyos.
«Comenzar viendo lo que tu pareja piensa sobre festejar con su familia y luego expresar tus deseos de estar con la tuya es un enfoque menos agresivo y que puede llevar a un acuerdo mutuamente aceptable», señaló al HuffPost.
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Establecer límites sobre los planes que se pueden hacer también es una buena idea; por ejemplo, explicar que es mucho más complicado hacer dos viajes durante un día festivo como Navidad o Año Nuevo, en lugar de solo hacer uno.
“Este límite se puede establecer con amabilidad y respeto y puede incluir una sugerencia para un plan alternativo el próximo año o el próximo día feriado”, dijo la psicoterapeuta Elisabeth J. LaMotte.
Sin embargo, si las familias de ambos viven relativamente cerca, es posible dividir la festividad para pasar la Nochebuena con la familia de uno y la Navidad con la del otro. Si ambas familias viven muy cerca, reunirlos a todos puede ser un gran plan.
Cuando la familia de uno de los integrantes de la pareja vive muy lejos, es más recomendable establecer otras fechas para visitarlos, pues la Navidad y Año Nuevo suelen ser temporadas altas de vacacionistas y el viaje podría convertirse en una pesadilla.
Alternar las fechas es otra solución que se puede plantear con tu pareja, para pasar Navidad con una familia y Año Nuevo con otra, y luego invertir las visitas al siguiente año.