Un grupo de confinados de la cárcel de ‘La Pica’ se comprometieron a continuar su proceso de rehabilitación utilizando la agricultura como ente de trabajo una vez se integren a la libre comunidad.
Eso fue lo que sucedió en un recorrido que realizó el senador por el Distrito de Ponce, Luis Berdiel Rivera en la cárcel ‘La Pica’ en conjunto con el secretario de Corrección y Rehabilitación (DCRH), Eric Rolón, y la representante Jackie Rodríguez. Allí presenció de primera mano cómo los confinados trabajan en fincas de hidropónicos, frutas, vegetales y porquerizas que utilizan para consumo propio y venta a diversas compañías. Entre los proyectos venideros está el producir café para venderlo.
«Vimos la importancia de la rehabilitación de nuestros confinados y que los podamos llevar, una vez cumplan (su condena), a trabajar y que sean personas productivas y útiles en la libre comunidad que puedan aportar a la sociedad. Hemos podido ver cómo las facilidades se encuentran en extraordinarias condiciones y cómo trabajan para rehabilitar la granja de cerdos. También vimos cómo trabajan con las semillas de café y de igual manera el futuro proyecto de la marca de café ‘La Pica’…Estamos seguros que este proyecto seguirá creciendo en pro y beneficio de la rehabilitación de nuestros confinados, dijo Berdiel Rivera.
Por su parte, el secretario de Corrección y Rehabilitación comentó que los confinados “tienen un compromiso” con el campamento ‘La Pica’. Asimismo reiteró que “los buenos programas hay que mantenerlos y si se pueden mejorar así se hará. En conjunto con el Senado y la Cámara de Representantes vamos a llevar el campamento ‘La Pica’ y sus productos a la libre comunidad para maximizar aquí y tener una fuente de ingresos. También, ampliar las ofertas de trabajo que les vamos a ofrecer a los miembros de la población correccional”.
Luego de visitar la cárcel ‘La Pica’, Berdiel Rivera se trasladó hasta la Parcela #3 de la Finca Gripiñas en el Barrio Veguitas de dicho municipio que es propiedad de Emigdio Sepúlveda Rivera y Carmen Iraida Reyes Rivera. En dicho lugar realizó una vista ocular como presidente de la Comisión de Agricultura mediante la Resolución del Senado 4 que ordena al Departamento de Agricultura y a la Autoridad de Tierras proceder con la liberación de las restricciones y las condiciones sobre preservación e indivisión previamente impuestas y anotadas según dispuesto por la Ley Núm. 107 de 3 de julio de 1974, según enmendada, de la parcela marcada con el número 3-A de la finca denominada Gripiñas, localizada en el barrio Veguitas del término municipal de Jayuya, a los fines de permitir la segregación de un predio de seis cuerdas de esta finca.
Según se desprende de la medida los titulares solicitaron la segregación de dicho predio de la finca antes descrita para vender la misma y se continúe con el desarrollo agrícola tanto sobre el predio segregado como el predio remanente. Esta petición obedece a que Sepúlveda Rivera y su esposa se encuentran en un estado de salud que les impide trabajar la finca en su totalidad adecuadamente. Por tanto, es el deseo de los titulares traspasar el predio a ser segregado a alguna persona que pueda dedicarse al desarrollo agrícola del mismo.
La Ley Núm. 107 de 3 de julio de 1974, enmendó la Ley Núm. 5 de 7 de diciembre de 1966, que creó el Programa de Fincas de Tipo Familiar, conocida como Título VI de la Ley de Tierras, para establecer condiciones y restricciones de no segregación ni cambio de uso agrícola a las fincas adscritas al Programa de Fincas de Tipo Familiar. La legislación facultó al Secretario del DA para la disposición de terrenos para uso agrícola mediante cesión, venta, arrendamiento o usufructo.
La disposición de estas fincas bajo este Programa se realizaba bajo una serie de condiciones y restricciones que formaban parte de la escritura o de la Certificación de Título que emite el DA. Dichas condiciones solamente podrían ser variadas en unos casos excepcionales enumerados en la Ley o por disposición de la Asamblea Legislativa. Mediante el Plan de Reorganización Número 4 de 29 de julio de 2010, se estableció que el Programa de Fincas Familiares de la Corporación para el Desarrollo Rural de Puerto Rico pasaría a ser parte de la Autoridad de Tierras de Puerto Rico.