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Un grupo de abogados solicitaron en el día de hoy al Secretario de Hacienda, Juan Zaragoza, que posponga la implementación del nuevo Proyecto de Sellos y Comprobantes Electrónicos, pautado para comenzar el próximo 1 de abril, debido a que el mismo penaliza a los abogados colocándoles una desmedida carga económica que en esencia equivale a un nuevo impuesto.
«Estamos hablando que en apenas ocho días, todos los abogados, con bufetes o trabajando por su cuenta, perderán la habilidad de imprimir sus sellos porque el Departamento de Hacienda cambio, arbitrariamente y sin mucha notificación, las reglas de juego para penalizar a la clase togada de manera directa e indirecta. En esencia, Hacienda quiere imponernos un nuevo impuesto por la cocina, además de hacernos gastar más porque, por ejemplo, los que tiene computadoras Apple no podrán imprimir los nuevos sellos, el sistema solo acepta sistemas Windows. De verdad que es increíble», señaló el licenciado Hiram Torres Montalvo, líder del grupo.
A partir del 1 de abril, todos los clientes privados, abogados, bancos, cooperativas, municipios, que llevan más de una década imprimiendo sellos y comprobantes digitales, pierden su autorización y están obligados a pasar por un nuevo proceso burocrático del Departamento de Hacienda para estar autorizados.
En una carta enviada al titular de Hacienda, Torres Montalvo aseguró que «los nuevos requisitos de solicitud, fianza, procesos de reembolsos, cambios operacionales y procesales, los cuales han sido comunicados de forma accidentada y apresurada, obligan a una posposición que atienda las serias preocupaciones que levantan estos requisitos de la Agencia».
Entre los nuevos requisitos de Hacienda para los usuarios del Sistema de Venta de Sellos y Comprobantes Electrónicos se encuentra el tener que someter nuevamente el Formulario SC 3568 y radicar una jugosa fianza. También, tiene que ser una entidad registrada y presentar un certificado de ‘Good Standing’ ante el Registro de Corporaciones del Departamento de Estado. Por ende, abogados no incorporados, ni sociedades son autorizados para imprimir los nuevos sellos.
«Por primera vez, se establece un sistema de reembolsos que está totalmente diseñado únicamente para beneficiar al erario. Por ejemplo, si el usuario imprime un sello o comprobante digital por equivocación o se daña el sello durante la impresión, el Departamento cobrará por ese sello. Uno puede pedir un reembolso, pero el mismo puede tardar meses y está sujeto a si el cliente no tiene deudas con Hacienda», añadió Torres Montalvo.
El también aspirante a la Cámara de Representantes por el Partido Nuevo Progresista cuestionó lo oneroso de los demás requisitos.
«El nuevo sistema solamente funciona en una computadora con el sistema operativo de Windows con Internet Explorer 10+ que esté conectada localmente y directamente a una impresora láser. No funciona en impresoras que sean parte de un network ni sistema Wireless. El sistema limita el valor de los sellos y comprobantes que el cliente puede imprimir basado en la fianza pagada. Si tiene una venta especial por un valor mayor del sello o comprobante autorizado necesita solicitar autorización especial a Hacienda con suficiente tiempo en anticipación y solo una transacción. Esto haría que el abogado incurriera en gastos excesivos. Nuevamente, esto es un nuevo impuesto a los abogados de Puerto Rico», terminó diciendo el letrado.
