El paso del huracán María dejó estragos en las comunidades quienes a más de medio año continúan sin energía, y complica la recuperación de pacientes encamados y sus familias. Este es el caso de Abdriel Rivera Rivera, de 27 años de edad y vecino de Toa Alta, quien luego de un grave accidente ve difícil su recuperación por la falta de energía, que necesita para sanar sus heridas y continuar efectivamente su tratamiento.
Abdriel es un joven héroe de 27 años, quien a vive día a día luchando junto a sus familiares para recuperar la normalidad en su vida. Este joven, residente del barrio Rabo del Buey en Toa Alta y padre de cuatro hijos, fue al auxilio de una persona en el Expreso las Américas, y mientras ayudaba a mover el vehículo con desperfectos fue impactado por otro conductor en un accidente que casi le cuesta la vida. Como producto de ese suceso, Abdriel se recupera de una herida e intervención en la cabeza, así como varias operaciones, tornillos en ambas piernas, por lo que es necesario la energía eléctrica para la movilidad de la cama de posiciones y para la ventilación de las heridas.
La comunidad cuenta con nuevos postes instalados, que colocó el Municipio de Toa Alta para ayudar en la reparación del tendido eléctrico, pero hoy a más de seis meses, sin energía, la comunidad en la que habitan más de 400 personas sigue sin energía, y sin fecha establecida para que la Autoridad de Energía Eléctrica o el Cuerpo de Ingeniero inicie los trabajos de recuperación. Además, hay un derrumbe en la comunidad, que limita el acceso a la misma, y ha impedido que ambulancias puedan buscar Abdriel para asistir a las citas, terapias y requerimientos médicos.
«Abdriel perdió los beneficios de ambulancia, porque no recibimos ayuda con el derrumbe. Vino el representante (Nelson del Valle), nos prometió ayuda, y nos dejó arrollaos. Este abuso tenemos que pararlo» comentó Javier Ortega, padrastro de Abdriel, quien clama por ayuda.
La comunidad hace un llamado a las autoridades para que energicen el área y puedan brindarle luz a Abdriel, como a toda la comunidad en la que viven residentes mayores de edad y con condiciones de salud. Además, hacen un llamado para que las autoridades pertinentes ayuden en la limpieza, con maquinaria, del derrumbe para que puedan llegar alas ambulancias y ofrecer el servicio.