Foto Archivo
Por mucho tiempo se nos ha dicho que un poco de vino en la cena puede ayudarnos a prevenir enfermedades cardíacas, y quizás mejorar nuestra salud. Sin embargo, algunas investigaciones están cuestionando si los beneficios de beber moderadamente, una bebida al día en las mujeres y dos en los hombres, en realidad es una desventaja.
Sabemos que, en los adultos mayores, mucho alcohol puede empeorar la presión arterial alta, aumentar el riesgo de caídas y fracturas, y llevar a sufrir ataques cerebrales, pérdida de memoria y trastornos en el estado de ánimo. Y según un estudio publicado en la revista científica JAMA Psychiatry en agosto, en este grupo, los problemas con el consumo de alcohol, como la ansiedad incontrolable de beber, se dispararon 107% entre el 2001 y el 2013. Incluso pequeñas cantidades de alcohol pueden interactuar con los medicamentos (ver “El alcohol y los medicamentos”, abajo), contribuir al riesgo de cáncer y a una potencial disminución cognitiva.
Aquí incluimos las últimas investigaciones y consejos sobre cómo puedes asegurarte de que no te estás excediendo.
Cómo mantener la línea durante las fiestas navideñas
Beneficios y riesgos
Se ha encontrado en más de 100 estudios que una o dos bebidas al día están relacionadas con un 25% a 40% de reducción del riesgo de sufrir un ataque cardíaco, accidente cardiovascular o muerte por problemas cardíacos de acuerdo con la Facultad de Salud Pública T.H. Chan de Harvard. Otro estudio publicado en agosto, que dio seguimiento a más de 333,000 personas por 12 años, encontró que los bebedores leves a moderados tienen de 21% a 34% menos posibilidad de morir de una enfermedad cardiovascular.
Pero no hay estudios que hayan evidenciado directamente que el alcohol mejora la salud en los humanos. La mayoría de las investigaciones en esta área se ha enfocado en si las personas reportaron comportamientos por la bebida que están “asociados” con resultados de salud positivos o negativos.
Un número creciente de investigaciones también sugiere que el consumo moderado regular de alcohol puede tener sus riesgos. Un estudio que se realizó durante 30 años, publicado en junio en la revista médica British Medical Journal encontró que los hombres que consumen de 8 a 12 bebidas por semana tienen 3 veces más probabilidad de tener un hipocampo atrofiado, que es un posible signo de Alzheimer. Esto según la autora del estudio, Anya Topiwala, Ph.D., una académica en el departamento de psiquiatría de la Universidad de Oxford en el Reino Unido.
Y otras investigaciones han encontrado que beber moderadamente puede estar relacionado con un alto riesgo de desarrollar cáncer de seno y, especialmente entre los fumadores, cáncer esofágico, de boca y de garganta.
Bomberos tienen mayor probabilidad de padecer cáncer de piel
Controla tus porciones
Aunque beber con moderación no está exento de riesgos, generalmente está bien tomar una copa de vino al día, dice George F. Koob, Ph.D., director del Instituto Nacional de Abuso del Alcohol y Alcoholismo, aunque ya tengas más de 80 años. “No queremos asustar a la gente”, agrega Topiwala. Pero si no bebes, dice, no hay ninguna razón para empezar por cuestiones de salud. Y si sobrepasas las regulaciones alimenticias, dice Koobs, no hay problema: Considera disminuirlo. Estas estrategias te ayudarán.
Mide tu bebida. Puede ser casi imposible medir a simple vista una bebida estándar (5 onzas de vino, 12 onzas de cerveza, y 1 1/2 onzas de bebidas destiladas). Algunos vasos o copas pueden contener hasta 22 onzas, más que la cantidad en 4 bebidas. Entonces usa un medidor o una copita para calcular bien.
Controla la cantidad. Llevar un registro de la cantidad de bebidas que tomas al día o a la semana, quizá anotando en una servilleta de coctel, te puede ayudar a mantenerte en tu límite.
Alterna con agua. Beber a sorbitos un vaso de agua pura o agua mineral después de cada bebida alcohólica te ayudará a beber más despacio.
Habla con tu médico. Si estás preocupado por tu manera de beber, no temas hablar de esto en tu próxima consulta.
El alcohol y los medicamentos: Una peligrosa combinación
El alcohol puede interactuar con ciertos medicamentos, intensificando la intoxicación y los efectos secundarios. A continuación, algunos riesgos potenciales que aumentan si bebes:
-> Medicamentos ansiolíticos como alprazolam (Xanax y genéricos): somnolencia, una sobredosis, y problemas respiratorios.
-> Medicamentos para la presión arterial como captopril (Capoten y genéricos), felodipina (Plendil y genéricos), y diuréticos: mareos, desmayos y problemas cardíacos.
-> Medicamentos para el resfriado y las alergias: somnolencia. El jarabe para la tos también puede aumentar el riesgo de somnolencia y de una sobredosis.
-> Analgésicos como la aspirina, ibuprofeno (Advil y genéricos), naproxeno (Aleve y genéricos): hemorragia interna y úlceras. El acetaminofeno (Tylenol y genéricos): daño hepático.