El Proyecto del Senado 1177, de mi autoría, propone declarar el español como primer idioma oficial y el inglés como segundo idioma oficial. El mismo “NO” afecta, ni modifica en nada la educación y enseñanza del inglés en las instituciones educativas. Como bien se indica en el Artículo 7 de la medida: “Las disposiciones de esta Ley NO afectarían la enseñanza de la materia del inglés en las escuelas o instituciones educativas del Sistema de Educación Pública del Estado Libre Asociado de Puerto Rico”. De igual forma, el proyecto reconoce el idioma inglés como uno favorable para el desarrollo económico y comercial en nuestro país.
Actualmente, en las estadísticas poblacionales del último Censo mostraron que un 80% de los ciudadanos en Puerto Rico no hablan inglés y cada vez vemos cómo se reemplaza el idioma español por el inglés en las comunicaciones y gestiones gubernamentales, porque la ley actual lo permite, al reconocer que ambos idiomas pueden usarse “indistintamente”. Esto provoca incertidumbre en la ciudadanía.
Como resultado de esto, la intención del proyecto es asegurar que todos los puertorriqueños puedan entender y comunicarse adecuadamente con su gobierno en su lengua vernácula. Decir que la medida propuesta por este servidor es una actividad retrógrada a las tendencias mundiales en enfatizar el idioma inglés en sus sistemas de educación, es faltarle a la verdad y entra en una demagogia a lo que se está proponiendo, convirtiéndose en una clara desinformación al pueblo y demostrando un vago y escaso conocimiento sobre el proyecto.
En momentos de crisis como los que se vive no es prudente ni moralmente correcto el desinformar al pueblo por agendas personales o ideológicas. Unamos fuerzas y voluntades en busca de un mejor Puerto Rico, resaltando nuestra identidad cultural. Todo compatriota que como yo, Puerto Rico es primero, debe favorecer este proyecto, que es uno de justicia y de reivindicación del derecho que tenemos todos en comunicarnos eficazmente en nuestro idioma español con el gobierno y viceversa.