La oposición de Venezuela obtuvo una amplia victoria en las elecciones parlamentarias celebradas este 6 de diciembre.
El Consejo Nacional Electoral confirmó que la Mesa de Unidad Democrática tiene asegurados al menos 99 escaños en la Asamblea Nacional, mientras que el oficialismo por el momento nada más consigue 46.
Todavía quedan 19 plazas en disputa. Si la oposición logra 12 plazas más se asegurará los dos tercios de la Asamblea Nacional, con lo que podría reformar la Constitución venezolana.
Se trata de la primera vez que la oposición obtiene la mayoría de la Asamblea Nacional en 17 años de gobierno chavista.
El resultado fue dado a conocer por la presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, poco después de la medianoche y luego de una larga y tensa espera.
«Felicitamos al pueblo de Venezuela. A los ganadores les pedimos que administren sus triunfos y a los perdedores los felicitamos», dijo Lucena, quien informó que la participación fue del 74,25% de los potenciales votantes.
E inmediatamente después el presidente Nicolás Maduro se dirigió a la nación para aceptar la derrota.
«Los aceptamos, los resultados exactamente como han sido emanados por el poder electoral», dijo Maduro, quien insistió en que su partido había perdido una batalla, pero no la guerra. Esto lo agarramos como una bofetada para despertar hacia lo que nos toca en el futuro«, declaró el mandatario.
Aunque la campaña fue dominada por las denuncias de ventajismo oficial, expertos coinciden en que la crisis económica llevó a muchos a ejercer el voto castigo en contra del gobierno.
Y como explicó el corresponsal de BBC Mundo en Venezuela, Daniel Pardo, ahora todos seguirán con suma atención la decisión sobre los 19 escaños todavía no declarados.
«Si la oposición sólo consigue la mayoría simple se verá obligada a negociar con el gobierno», recordó Pardo.
Y en el campo opositor son muchos lo que están convencidos de haber conseguido al menos 113 diputados.
Aunque, según Pardo, pase lo que pase «se trata ya de un resultado histórico que dará mucho de qué hablar y abre la puerta para una etapa inédita en la historia reciente de Venezuela».
